miércoles, 26 de enero de 2011

Trucos

Trucos para multiplicar la claridad

Un mueble lacado, una tela de textura sedosa o un espejo colocado con idea son algunos trucos que te ayudarán a sumar luz de manera fácil y decorativa .
 
 

Más luz con muebles lacados

¿Puede un determinado acabado de un mueble ayudarte a ganar claridad? Por supuesto que sí. Y es que las superficies brillantes y satinadas de los muebles lacados actúan de improvisado espejo reflejando, con ello, la luz. Además, las piezas lacadas vuelven a estar de moda y están disponibles en muchos colores, desde los más clásicos y atemporales, como aquí el blanco, hasta los más extremados, como el rojo. Sin embargo, el aliado indiscutible de la claridad es el blanco que, junto con el crema y el gris claro, suele ser el más habitual. Un consejo: evita un ambiente monocromático y combínalo con tonos fríos. El contraste entre opuestos hará destacar aún más la luz natural.

Materiales transparentes y versátiles
• Cristal. Es ligero, decorativo y no pasa de moda. Aunque es delicado, hay nuevos tratamientos que lo hacen más resistentes a los golpes.
• Metacrilato. Es una alternativa más económica, resistente y liviana al cristal. Por ello, es perfecto en casas con niños pequeños. Permite múltiples colores y acabados.


Coordinar texturas con acierto

Mezcla y acertarás. Eso sí, con criterio. Y es que la combinación de diferentes texturas puede ayudarte a ganar mayor sensación de claridad. Prueba a mezclar texturas brillantes y mates en el conjunto de telas y tapicerías de una estancia, y verás cómo ésta se transforma. No tengas miedo de poner color, ya que éste no está reñido con la sensación de luz. Así, en dormitorios puedes apostar por tejidos azules, grises o verdes para crear ambientes relajados y, a la vez, frescos y luminosos, mientras que en estancias como el salón los tonos cálidos como cremas o tostados reforzarán la sensación de calidez y recogimiento. En general debes reservar la nota más intensa para el suelo, como aquí la alfombra de pelo largo, e ir “aclarando” las tonalidades conforme la mirada sube hasta acabar con un techo blanco, en el que rebota la luz al entrar.
Telas que te ayudarán a ganar luz
• Tapicerías. Para las piezas voluminosas, como los sofás, mejor tejidos claros y con una textura lisa o un poco brillante como chenilla o seda.
• Ropa de cama. Por su confort, el algodón 100% natural es una muy buena opción. Los plaids te ayudarán a dar brillo y contraste, como aquí.
• Cortinas. Asegúrate de que no tapan la luz pero que tienen caída. Lino y loneta son una buena opción.
• Estores. Los tipo visillo, por su transparencia, y las telas de trama abierta son los que dejan pasar más la luz.


Complementos que suman luz

No se trata de abigarrar el espacio con objetos, sino de servirse de los pequeños complementos para atrapar la luz. Desde las paredes, los espejos juegan a dar profundidad y multiplicar la luminosidad. La ubicación más adecuada es en perpendicular a la entrada de luz natural, ya que la expande mejor, y a la altura de los ojos, más o menos. Asegúrate de que refleja una zona atractiva y no una pared vacía y elige su tamaño en proporción a los metros que ocupa y a la estancia. En los últimos tiempos, sus marcos han ganado protagonismo y sus bordes biselados o pulidos han dado paso a molduras, acabados pan de plata o con efecto dorado envejecido, lo que les confiere una nota sofisticada y un plus de brillo. Las plantas, los centros de flores con agua y las velas en vasitos de cristal son tres aliados, también, de la claridad.

Materiales aliados con la claridad
• Cristal. En forma de portavelas, jarrones o copas, deja pasar la luminosidad, la refleja y la expande por toda la estancia.
• Forja. Su silueta alambrada ligera y estilizada se deja querer por la luz y la deja circular libremente.
• Fibras vegetales. En alfombras o cestos aportan calidez y una nota de liviana naturalidad. Te ayudan a suavizar materiales más fríos.
• Metálicos. Estaño, cinc, plata... Su efecto espejo irradia luz y potencia la claridad combinado con blanco y madera.

jueves, 20 de enero de 2011

Reformas

Todo lo que debes saber para restaurar un piso antiguo

En este artículo encontrarás todo lo que necesitas saber para hacer frente con éxito a la reforma integral de un piso antiguo.
 
 

Cambiar las instalaciones

De puertas para adentro, la renovación de las instalaciones será una de las partidas más importantes del presupuesto. Sin embargo, antes de empezar, ten en cuenta que si la reforma del piso afecta a su estructura deberás pedir licencia de obras, que puede encarecer entre un 3% y un 5% el presupuesto final. Lo mejor es ponerse en manos de un profesional para que haga un estudio previo y supervise las obras.
Los profesionales consideran que las instalaciones eléctricas de más de 25 años pueden ser peligrosas si no han sido revisadas (lo normal es hacerlo cada diez años). Por ello, hay que renovar los elementos deteriorados y adaptar la demanda de potencia contratada.
Antes de redistribuir la cocina y el baño, es importante una buena planificación. Para ello, ten en cuenta la ubicación de los desagües y los bajantes, ya que un cambio en su recorrido encarecerá el precio de las obras. Recuerda que antes las tuberías eran de plomo o de hierro galvanizado, muy contaminantes y prohibidos hoy en día. Ahora se usa el cobre para las tuberías de abastecimiento por su resistencia a la cal y a los sedimentos, y el PVC en las tuberías de evacuación y de desagüe.
Aprovecha las obras para ocultar los cables en falsos techos y planificar puntos de luz, enchufes o tomas de teléfono. El reglamento del instalador prevé un mínimo de 20 enchufes por piso y de 30 puntos de luz.
¿Sabías que…? Los contadores electrónicos permiten la discriminación horaria del consumo y su telegestión, a la vez que son más precisos y potencian el ahorro.




Renovar las paredes

La fase de derribo es la primera a llevarse a cabo en cualquier reforma. Por ésta se entiende la demolición y extracción de los elementos a sustituir, que comprende desde la eliminación de tabiques a la extracción de revestimientos. Según su envergadura.
En el caso de las paredes, el grueso del trabajo suele concentrarse en la eliminación de los revestimientos del baño, así como de las sucesivas capas de pintura y papeles pintados que se han acumulado con los años.
La reforma integral de un baño llevará unos 20 días. Tras retirar las piezas, hay que preparar las superficies, alisarlas y proceder a alicatar, primero las paredes y luego el suelo. En zonas en contacto con el agua conviene elegir materiales resistentes, como los cerámicos o las piedras. Para el resto, son tendencia los papeles pintados. Para 15 m2 necesitarás unos 11 rollos

Actualizar el suelo sin obras

Existen tres maneras relativamente sencillas para darle un aire nuevo al suelo:
Flotante. Es la colocación de suelos de madera más rápida y económica, ya que se instala encima del pavimento existente gracias a su sistema de lengüeta y ranura.
En seco. Reduce las obras necesarias para la colocación de suelos cerámicos al no precisar morteros. Las piezas, reutilizables y fáciles de desmontar, son algo más caras que un cerámico convencional .Microcemento. Es un alisado de cemento de 2 mm de espesor que ofrece superficies continuas. Permite renovaciones rápidas y ahorro de tiempo y dinero.





Pisos bien aislados

La renovación de las ventanas y un buen aislamiento aseguran el confort térmico y acústico dentro de casa y, de paso, contribuyen a ahorrar energía y dinero. Se estima que las mejoras en aislamiento pueden reducir del orden de un 30% la factura de calefacción y de refrigeración.
Ventanas. La perfilería de aluminio es la más utilizada por su escaso mantenimiento y sus acabados. Para mejorar su capacidad aislante debe incorporar rotura de puente térmico en el doble cristal. El sistema de apertura más práctico es el oscilobatiente, aunque resulta más caro.
Aislamiento. Se instala entre los elementos estructurales (forjado, tabiques y muros). El corcho es el más ecológico y sirve para aislar paredes, techos, suelos y cubiertas por su baja conductividad térmica y su tolerancia a la humedad.
Calefacción y climatización
Son los dos sistemas más utilizados para proporcionar calor en un piso antiguo.
Gas natural. Este sistema, a base de una caldera y radiadores, no precisa muchas obras y también permite calentar el agua. Si la vivienda ya dispone de gas natural, hay que realizar una inspección de la instalación y renovar la caldera y el calentador. En caso contrario, se debe conectar a la instalación comunitaria.
Eléctrica. Sus radiadores no precisan instalación previa, ya que se conectan a la corriente. Si optas por un sistema de bomba de calor tendrás calefacción y aire acondicionado.

Elementos con historia

Más allá del estado de los materiales, existen elementos propios de la arquitectura de estos pisos que merece la pena conservar. El objetivo de la reforma debe ser eliminar aquellos espacios que carecen de función manteniendo su bello espíritu noble.
Techos. Vigas, bóvedas molduras... En ocasiones al quitar un falso techo se encuentran verdaderas obras de arte constructivas a las que una buena rehabilitación puede proporcionar una vida nueva.
Pátina. Un buen modo de resaltar la presencia de elementos como arcos o molduras consiste en pintarlos de un color más claro. Esto, además, dará más altura a los techos.
Rehabilitar. Si quieres dejar una pared de obra vista, pintada en blanco o de colores claros se integrará mejor. Lo más importante es llevar a cabo un buen proceso de sellado previo, ya sea por picado manual o por arena a presión, y luego tratar la superficie con aceites o barnices.
Para conservar y destacar
Es importante valorar qué se puede rescatar de la reforma, pues en muchos casos puede abaratar el coste de la reforma,. Además, en ocasiones es suficiente con restaurar una parte o sustituir algún elemento deteriorado para que vuelva a recuperar su aspecto original.
Puertas. Si es posible es mejor conservarlas, tanto por su estética –sus cuarterones y su altura– como por su coste económico, ya que sus medidas especiales exigen una pieza a medida, lo que puede duplicar su precio. Para recuperarlas, hay que lijarlas, aplicar tapaporos y la pintura elegida.
 Mosaico hidráulico. Pierde color y su textura se vuelve rugosa. Tiene un pulido y abrillantado profesional
Cristales. A veces es más fácil y económico renovar todas las lunas de una puerta acristalada que intentar encontrar un cristal parecido al original. En las tiendas de objetos de derribo puedes dar con auténticas joyas.